El nuevo avión supersónico ZEHST (Zero Emisssion HyperSonic Transportation) volará en 2050 a 6.000 km/h por los cielos del planeta mediante combustibles limpios. El aparato del consorcio europeo EADS llega al Salón Aeronáutico de Le Bourget para llenar con mejores prestaciones el vacío dejado por el Concorde.
Ocho años después de la desaparición de aquel supersónico comercial, el dueño de Airbus presenta la maqueta del ZEHST en la feria de París. El futuro avión cuadruplicará la velocidad del sonido, duplicará la del Concorde y recorrerá en dos horas y media la distancia entre la capital francesa y Japón. Lo logrará gracias a biocarburantes de algas, hidrógeno y oxígeno.
El ZEHST volará por encima de la atmósfera, a unos 32 kilómetros sobre el nivel del mar, frente a los 18 del anterior supersónico o los 11 de los vuelos comerciales. El despegue será tradicional y se servirá de los turborreactores alimentados con combustible elaborado a base de algas marinas.
Al llegar a los 5 kilómetros de altura tomarán el relevo los motores propulsados por una mezcla de hidrógeno y oxígeno, fruto de la tecnología utilizada en los cohetes Ariane. Y a los 23 kilómetros de altitud entrarán en acción los reactores que permitirán volar a 5.000 kilómetros por hora, la velocidad de crucero del ZEHST.
El billete entre París y Nueva York costará entre 6.000 y 8.000 euros, por lo que el público objetivo de las cien plazas del ZEHST serán los ejecutivos de negocios.
La financiación del aparato precisará de las ayudas europeas del programa comunitario para la reducción de la contaminación.
El encuentro de Le Bourget, abierto entre el 20 y el 26 de junio, también presenta otros proyectos de aviación sostenible. Es el caso del aparato 747-8 del fabricante estadounidense Boeing, propulsado exclusivamente con carburantes ecológicos. También está presente como invitado de honor el Solar Impulse, un avión alimentado por energía solar y que ya ha demostrado su éxito.
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